El comercio electrónico transfronterizo de mercadería está en auge, y McKinsey & Company predice que al 2030 se puede expandir hasta alrededor de 1 billón en valor de mercancía con respecto a su valor actual de 300.000 millones aproximadamente.

Como indicamos en nuestro reciente blog sobre tendencias internacionales del comercio electrónico, los minoristas y fabricantes globales están usando el comercio electrónico transfronterizo para expandirse hacia Estados Unidos, abrirse a mercados extranjeros y construir un sistema de distribución omnicanal resiliente a nivel internacional.  

Aprovechamiento de oportunidades más allá de las fronteras 

El transporte de mercancía a través de la cadena de suministro de comercio electrónico internacional requiere diversos procesos, partes involucradas y sistemas. Abarca los procesos de primera milla, etiquetado y consolidación en origen, y de despacho,  desconsolidación y entrega de última milla en destino.

Como consecuencia, las ineficiencias, los errores y la falta de visibilidad causan retrasos en las entregas a expensas de los clientes, manipulaciones adicionales que erosionan los márgenes, y excepciones e incumplimientos evitables que ponen en riesgo órdenes o embarques completos.  

El comercio electrónico transfronterizo fluido y eficiente requiere que todas las funciones y partes involucradas tengan acceso a las órdenes con visibilidad, accesibilidad y capacidad de procesamiento, sin importar si son exportadores que trabajan en el país de origen o si trabajan en el destino. Además, el paso fundamental para un embarque exitoso es la preselección y validación de órdenes para identificar y resolver problemas antes de perjudicar a la orden.   

Cómo gestionar con eficiencia y a través de la tecnología cada parte de la cadena de suministro de comercio electrónico transfronterizo

A medida que las órdenes de comercio electrónico se desplazan por cada paso de la cadena de suministro internacional, las eficiencias, automatizaciones y mejoras de productividad pueden ayudar a los agentes de carga, quienes deberían tener en cuenta estos siete pasos: desde la primera hasta la última milla.

Primera milla: Las integraciones del sistema crean automáticamente la orden y facilitan el acceso a la información, lo que da inicio a la recogida y al proceso sin la necesidad de perder tiempo ingresando datos de manera manual, por lo que se pueden evitar errores.  

Validación de datos y revisión previa: Las configuraciones flexibles de revisión permiten a los usuarios configurar reglas para términos y condiciones que saben que darán lugar a excepciones en el futuro, como valores menores, partes restringidas y descripciones del producto. Estas notifican al usuario acerca de datos problemáticos para que luego puedan solucionarse y, con el tiempo, generan un glosario de términos y condiciones por temas que interrumpirían el flujo de los embarques si no se controlan.  

Etiquetado en origen: La automatización de las etiquetas de entrega de última milla mediante el proceso en cinta transportadora de “escanear, reservar, imprimir” no solo ahorra tiempo en el país de origen sino que también reducirá la manipulación en el país de destino. El acceso a la gestión empresarial de paquetes de múltiples transportistas en el proceso permite tomar instantáneamente la decisión de transporte más rentable para el tramo final.  

Consolidado: Combinar de la carga de varios clientes en embarques con el mismo destino puede reducir los costos y aumentar la rentabilidad por contenedor. Por ejemplo, un agente de carga puede recibir manifiestos de tres clientes diferentes, cada uno con embarques a los mismos tres países. En vez de enviar los embarques en nueve contenedores, se pueden consolidar en tres contenedores: uno por cada país de destino. De esta manera, llenan cada contenedor y reducen el número de cargas mínimas por contenedor.  

Despacho de aduanas: Despachar cientos o miles de embarques de forma individual insume mucho tiempo e implica un proceso intenso. Tener la capacidad de presentar muchas declaraciones en una sola vez, incluso de distintos clientes, es fundamental para las órdenes de gran volumen y poco valor del comercio electrónico internacional. Además, en el caso de que una orden se marque por infracción, es importante contar con capacidades de búsqueda configurables para poder ubicar esa orden y rápidamente gestionar la excepción.  

Desconsolidación: Cuando un contenedor llega al país de destino, es importante gestionar cuidadosamente la paquetería y los paquetes en el almacén, como también registrar los eventos para cada paso a fin de garantizar la visibilidad en tiempo real. Esto incluye el manejo adecuado de paquetes “despachados por aduana” y “retenidos”.   

Entrega de última milla: Como los paquetes se etiquetan en el país de origen, se inyectan rápidamente en la red de paquetería. A menudo, los costos laborales del país de origen son inferiores a los del país de destino.  Los eventos de entrega del transportista de última milla se rastrean en tiempo real, incluida la confirmación de entrega.  

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